
Wellington Rubio
Diplomático, abogado y político ecuatoriano
Wellington William Rubio Méndez, es un abogado guayaquileño, radicado en la ciudad de Quito, con una mención en derecho público por la Universidad Católica Santiago de Guayaquil y un perfil marcado en la mediación y la resolución de conflictos.
En sus orígenes pasó por la Secretaria Nacional Anticorrupción y luego se desempeñó en temas ambientales y fue parte del proyecto Guayaquil Ecológico que incluía la construcción del primer gran parque en la ciudad de Guayaquil (el tercero más grande América latina).
Tiene una maestría en Relaciones Internacionales por la Universidad Fairleigh Dickinson de New Jersey, Estados Unidos con una mención en asuntos globales, así como estudios sobre Movilidad Humana y empoderamiento productivo por la Escuela de Ciencias sociales, Henry George, de la ciudad de New York. Fue jefe político de Durán en el 2008. Actualmente es funcionario de la Cancillería del Ecuador con el grado de Tercer Secretario del servicio exterior desde el 2012 y ha ocupado algunos cargos de importancia como ser Vicecónsul del Ecuador en el Estado de New Jersey, en Estados Unidos.
Su fuerte es el área de la Movilidad Humana, ha trabajado en el área de protección internacional con refugiados, y en protección a vulnerables en el exterior. Ha trabajado con la OIM en temas relacionados con la creación de los protocolos sobre Trata y Tráfico de Personas. Trabajó en UNASUR previo a su creación. Es conocedor de temas de integración y convergencia. Su liderazgo es atípico, diferenciador y motivador. Tiene destrezas en trabajo en equipo y siempre encuentra formas de potenciar los entornos de los cuales es parte. Es influyente en su círculo y su filosofía no es llegar primero sino hacer que todos se sientan en la capacidad de llegar al mismo objetivo.
Actualmente, en el 2025, estará como candidato suplente a la Asamblea Nacional por las parroquias de Quito por el movimiento político RETO, número 33.
Los que lo conocen lo describen como multifacético, porque es un amante de los deportes extremos, escala, trepacerros, surfea, corre, le fascina escribir, viajar, el menudo de la Floresta de Quito y el café. Le dicen el monazo, Well o Willy.
Aprendió a patinar después de los 40 años y llegó a obtener en competencias oficiales un tercer lugar en salto (Jump) en patines por la Federación Ecuatoriana de Patinaje. Ha viajado en coche, desde Montreal hasta Key West (Cayo Hueso), en la Florida y luego por el caribe.
Sus credenciales más importantes son su sencillez, su trabajo, tenacidad y disposición al aprendizaje y al cambio constante.

Acompáñame en esta aventura excitante llamada Ecuador.
Soy el creador del espacio política en patines, un lugar donde hablo de política, derecho, deportes, gastronomía y turismo.
Aquí podrás encontrar algunas experiencias de mis aventuras en el país de las sopas.
¡Creo que es bastante para mi edad!
Una de las mejores cosas que he hecho en mi vida es poder conocer mi propio país, su comida, su gente, sus montañas, el frio de la sierra y el calor húmedo de la costa.
He podido estar en lo más alto de un volcán activo hasta debajo de las aguas y antes de que terminen mis días en esta tierra quiero, si Dios y el universo me lo permiten, poder recorrer cada lugar mágico de un país místico llamado Ecuador.
Cuando subí al volcán Tungurahua en septiembre del 2024, sentí que subió un Wellington y regresó otro. Llegué a la cima y había un sauna natural en la cúspide de un volcán activo. Perd´´i 2 unas al bajar (tuve un descenso eterno con unas botas muy apretadas) y me quedó una sensibilidad en mi mano derecha. Me atreví a hacerlo sin aclimatarme porque sentía que debía hacerlo así.
He nadado junto a tiburones en las islas Galápagos (león dormido) y he sentido lo insignificante que puede ser el ser humano frente a la naturaleza.
He comido unos gusanos vivos y muertos (Chontacuros, gusano de chonta en quichua) que la gente usualmente come en el Tena y en la Amazonía en general. Es como la papa para los quiteños.
Parece increíble pero no conocía mi propio país, así que desde un tiempo decidí conocerlo y meterme un sus profundidades geográficas, gastronómicas, sociales y políticas.
He podido surfear en sus playas de la costa y comer los mariscos de las playas.
Algunos videos los podrás encontrar en mi cuenta de Instagram. La idea es que el mundo sepa que hay pocos países como Ecuador.
Lo más divertido, lo hice en patines.